Sólo hacen falta dos requisitos: unos pocos materiales y seguir el paso a paso sin precipitaciones.
¿Para qué edad? Desde los 6 años, o incluso antes, si es un niño tranquilo, hasta los 100. No, no es exageración. Tengo una amiga nonagenaria, que encuentra con esta técnica, la actividad adecuada para su falta de movilidad y para dar rienda suelta a la artista que llevaba dentro.
MATERIALES NECESARIOS:
Lienzo blanco para pintar al óleo. De venta en tiendas de pintura, bricolaje e incluso en las tiendas de todo a 1 euro.
Rotuladores permanentes de colores, de varios grosores.
Rotulador permanente negro de grosor fino.
Bolígrafo azul, rojo o verde.
Papel de calco amarillo.
Goma de borrar.
Alcohol.
Palillos higiénicos.
Cinta métrica.
Regla.
Cinta adhesiva.
Barniz para cuadros en spray (opcional)
Revistas de punto de cruz y bordados, servilletas de papel decoradas, telas estampadas, postales de navidad, cuentos infantiles, papel de regalo, latas decoradas. En resumen, todo aquello donde veas una bonita pintura de colores y que puedas fotocopiar en blanco y negro.
PASO A PASO:
1º Elige el motivo. Quizás sea este el paso en el que tienes que hilar más fino. Para iniciarte comienza por algo sencillo. Es más fácil una foto de un bordado que una de punto de cruz, o una postal de navidad con la silueta de un angelito que una cara de un papá Noel.
2º Fotocopia en blanco y negro el motivo elegido, así no estropearás el original y te servirá para repetirlo, si no te queda del todo bien o si asombras al personal y te piden más cuadros iguales. La fotocopia te la pueden ampliar o disminuir al tamaño que tú desees. Si el dibujo lo obtienes de una revista de manualidades, de esas que tiene un anexo con los patrones, haz también fotocopia para no estropearla.
3º Compra el lienzo para óleo. Conviene que sea 3D, te explico, el canto debe ser anchito de 2 ó 3 cm y sin chinchetas ni grapas. Ten en cuenta que, generalmente, a no ser que tú lo desees, estos cuadros no van enmarcados y que por lo tanto el canto va a quedar a la vista, así queda más bonito ancho y limpio. Si no encontrarás lienzos 3D hay otra solución que consiste en rodear ese canto-una vez que el cuadro esté terminado- con un galón o pasamanería acorde con los colores del cuadro y que pegarás con cola de contacto, por ejemplo BUNITEX.
El tamaño del lienzo debe ser algo mayor, 2 ó 3 cm, que el de la fotocopia.
4º Presenta, coloca la fotocopia en el lienzo, céntrala bien, ayúdate de una regla o de una cinta métrica. Fíjala por un lado con cinta adhesiva, para que no se descoloque.
5º Coloca el papel de calco amarillo, entre la fotocopia y el lienzo–lo de este color va hacia abajo, pegado al lienzo- intenta que no se descentre, para ello pusiste un poco de cinta adhesiva. Una vez que te asegures que está bien colocado puedes fijarlo con más cinta, pero nunca sobre el dibujo porque no te calcará bien esa zona.
Si lo que estás calcando es un dibujo de punto de cruz, no hagas los entrantes y salientes de los rebordes propios de este bordado, para que no se te quede el dibujo con la orilla tipo sierra. Redondéalo como se aprecia en la foto.
7º Repasa todo el dibujo con el rotulador permanente fino negro, claro está, después de haber quitado los dos papeles. Siempre de izquierda a derecha o lo contrario si eres zurdo.
9ª Elige bien los colores. Peca por defecto más que por exceso. Haz las pruebas de colores en la trasera del cuadro sobre el trozo de lienzo que hay por detrás. Pinta siempre de modo que la mano que apoyas no lo haga sobre lo ya pintado, porque, si no está seco, lo irás emborronando. Intenta que te quede curioso y limpito. Ayúdate no sólo de la foto en color, a veces, las dudas las puedes resolver observando la fotocopia.
10º Deja secar y LÚCETE.
OBSERVACIONES:
La goma es para borrar alguna raya descontrolada, de las que, a lo mejor, has tenido que realizar para centrar el dibujo. Ciertamente, en el lienzo no se borran bien las marcas, así que intenta hacer las menos posibles. Si la goma no te funcionara bien, inténtalo con miga de pan.
Esa es la razón, por la que hay que utilizar papel de calco amarillo, y no el negro de toda la vida, porque éste deja marcas difíciles de quitar.
El alcohol y los palillos higiénicos son sólo para casos extremos en los que hayas cometido un error. El algodón tiene que estar muy, muy ligeramente humedecido en el alcohol, casi seco, porque de lo contrario la pintura se extiende incontroladamente.
Si crees que el cuadro va e estar expuesto a luz muy intensa, preserva los colores con barniz en spray, de venta en tiendas de pinturas para cuadros.
4 comentarios:
Por casualidad he dado con tu blog, es muy interesante esta técnica que tan bien explicas paso a paso. Tengo una pregunta, ¿se podría hacer en lugar de sobre lienzo,sobre cartulina?. Me he mirado todas tus entradas de manualidades y me han encantado, la lámpara balde, los colgadores, los cuadros... Seguiré visitándote. Un beso
-Te uno a mis preferidos
¡Hola Pilar! Encantada de conocerte y de recibir tu visita. Me alegro que te gusten mis manualidades. Sí, los cuadros con rotuladores se pueden hacer sobre lienzo y sobre cartulina. la ventaja que tiene el hacerlos sobre lienzo es que no los tienes que enmarcar. Los consigues a precio muy económicos en las tiendas de todo a 1 euro. Si tienes cualquier duda al hacer alguna manualidad coméntamelo, con toda confianza, que intentaré ayudarte. Un abrazo de OLI
Oli, perdona que no te haya agradecido tu respuesta, no encontraba tu dirección, hoy he visto la publicación de los bolsos, y te he reencontrado. Probaré tu técnica sobre cartulina. Gracias. Un beso
Que guay, así como lo explicas parece fácil , intentaremos hacerlos porque me encantan sobretodo el de la habitación de bebé, el día que lo haga por supuesto que lo pondré en mi blog y te avisaré. Besitos
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